Conscientes de que debemos meter el acelerador hacia metas Sustentables del cuidado del ambiente y sobre todo de los recursos vitales:  AGUA, ENERGÍA Y EDIFICACIÓN SUSTENTABLE, hay que poner un especial enfoque de la interacción del ser humano con su entorno.

Mas del 90% de nuestras acciones son de impacto hacia el medio, desde que respiramos hasta donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo que es nuestro casa o empresa, transporte. 

Por eso integrar prácticas de consumo y utilización eficiente del agua, es primordial, revisemos nuestra rutina diaria desde que nos levantamos, nos bañamos utilizamos energía y derrochamos recursos, empezando por el agua del baño. 

Los habitantes en el mundo somos 7.8 billones,  mas del 30% posee una regadera o baño de ducha, mismo que no tienen un sistema que actué para minimizar el agua derrochada entre que el agua fría de tubería llega a estar caliente (35 a 40°C), en este lapso se estiman 15 a 20 litros mínimo de desperdicio.

Países con mas higiene estiman que el consumo diario de agua por persona es mayor a 300 litros de agua dulce, 200% mas de lo recomendado  (el consumo de agua por humano diario es de 100 a 150 litros). Gran parte de esa agua se derrocha porque la considera barata y un derecho.

Teniendo el panorama de cuanta agua consume el humano, ¿por dónde puedes empezar a ahorrar agua y recursos?  

Empieza desde la mañana, el agua es vida y conecta con ella todos los días, existen soluciones y tecnología para ahorrar agua, por ejemplo: el recirculador de agua fria a caliente, se instala en lavabo o tarjas, son dispositivos muy sencillos, es un gran avance para disminuir la pérdida de esa agua y que se reintregra al sistema,  hasta ahorros de gas y energía proporcionan.

Se calcula que por persona desperdiciamos mientras se calienta en la regadera, equivale a 365 garrafones de agua (20 litros) al año, para que alguien pueda beber o lavarse las manos.

Así es que mucho que reflexionar:  ¿sabias que si puedes hacer cambios?. 

Hoteles, empresas, casas, edificios, deportivos, escuelas, gimnasios, cabañas y todos los que usamos agua caliente para el baño, podemos hacer una gran labor, innovando y recirculando el agua fría.

"El agua que nos gastemos hoy,  es la deuda que vamos heredar"